Las salas blancas se utilizan en prácticamente todas las industrias donde las partículas pequeñas pueden interferir en el proceso de fabricación. Con el rápido desarrollo socioeconómico, especialmente en los experimentos científicos y los procesos de producción de alta tecnología, como la bioingeniería, la microelectrónica y el mecanizado de precisión, se exigen mayores niveles de precisión, miniaturización, pureza, calidad y fiabilidad en el procesamiento de productos. Las salas blancas proporcionan un entorno de producción interior que no solo beneficia la salud y la comodidad de los empleados, sino que también influye en la eficiencia de la producción, la calidad del producto e incluso la fluidez del proceso productivo.
El componente clave de una sala blanca es el filtro HEPA (filtro de aire de partículas de alta eficiencia), por donde pasa todo el aire que ingresa a la sala, filtrando las partículas de 0,3 micras o más. En ocasiones, cuando se requiere un nivel de limpieza más estricto, puede ser necesario utilizar un filtro ULPA (filtro de aire de partículas ultrabajas). Las personas, el proceso de fabricación, las instalaciones y los equipos generan los contaminantes que son filtrados por los filtros HEPA o ULPA.
Independientemente de las variaciones en las condiciones atmosféricas externas, la sala blanca modular mantiene las características de limpieza, temperatura, humedad y presión preestablecidas. En este artículo, presentaremos cuatro elementos clave del diseño de salas blancas.
Arquitectura de salas blancas
Los materiales de construcción y los acabados son importantes para establecer los niveles de limpieza y para minimizar la generación interna de contaminantes en las superficies.
El sistema de climatización
La integridad del entorno de la sala blanca se crea mediante el diferencial de presión con respecto a las áreas adyacentes, a través del sistema de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC). Los requisitos del sistema HVAC incluyen:
1. Suministrar flujo de aire con volumen y limpieza suficientes para mantener el nivel de limpieza de la habitación.
2. Introducir aire de manera que se eviten zonas de estancamiento donde se puedan acumular partículas.
3. Filtrar el aire exterior y recirculado a través de filtros de aire de partículas de alta eficiencia (HEPA).
4. Acondicionar el aire para cumplir con los requisitos de temperatura y humedad de la sala limpia.
5. Garantizar suficiente aire acondicionado de reposición para mantener la presurización positiva especificada.
Tecnología de interacción
La tecnología de interacción comprende dos elementos: (1) el movimiento de materiales dentro del área y el movimiento de personas, y (2) el mantenimiento y la limpieza. Es necesario establecer instrucciones, procedimientos y acciones administrativas en relación con la logística, las estrategias operativas, el mantenimiento y la limpieza.
Sistemas de monitoreo
Los sistemas de monitorización incluyen un mecanismo para indicar el correcto funcionamiento de la sala blanca. Las variables monitorizadas son la diferencia de presión entre el exterior y la sala blanca, la temperatura, la humedad y, en algunos casos, el ruido y las vibraciones. Los datos de control deben registrarse periódicamente.
Por lo tanto, los sistemas de climatización en salas blancas difieren drásticamente de los de edificios comerciales en cuanto a diseño de equipos, requisitos del sistema, fiabilidad, tamaño y escala. ¿Pero dónde podemos encontrar un proveedor de soluciones fiable para salas blancas especializado en diseño de climatización?
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Fecha de publicación: 21 de septiembre de 2020